.-
Toma un recipiente de plástico transparente (botella de refresco
cortada por la parte inferior)
2.- Rellena el
interior con capas de algodón, arena fina, arena gruesa y grava, tal
como puedes apreciar en la imagen. Coloca el "invento" en
la posición adecuada y sitúa un recipiente bajo la boca de la
botella.
3.-
FUNCIONAMIENTO
Toma
un recipiente con agua. Echa en el agua, por ejemplo, un poco de
tierra, polvo de tiza, una cucharadita de cemento o yeso, cáscaras
de pipas, arena, fibras, restos vegetales, etc.
Remueve
y... ¿que te parece la mezcla? Se trata de representar las aguas
residuales.
Sobre
un recipiente, sitúa el colador y haz pasar la mezcla a través de
él. Obtendrás la primera separación de sustancias contaminantes,
las más voluminosas quedarán en el colador.
Toma
el recipiente y echas su contenido, poco a poco, sobre el filtro que
has construido. Observarás cómo los fragmentos que lograron pasar
por el colador, van depositándose en las diferentes capas que forman
el filtro. El agua resultante pasará al recipiente inferior.
Deja reposar durante un día. Al día siguiente
comprobarás que en el fondo del recipiente se ha depositado una fina
capa de limos, mientras que el agua está menos turbia que el día
anterior.